De friega platos, locuras y apegos...
Aquí estoy charlando animadamente con Manolito y el Grumete intentando dilucidar si soy materialista, muy apegada, enormemente cariñosa o simplemente estoy un poco “Pa’lla” que dirían en mi pueblo.
Yo voto por cariñosa, el voto del grumete está clarísimo: el piensa sin dudarlo un segundo que estoy loca perdida así que ¡Venga Manolito dime algo!
Lo miro esperando me de una respuesta y...
... “No sabe no contesta”, no me extraña típico del género masculino, el a lo suyo, liado calculando la cantidad exacta de jabón que va emplear y la temperatura perfecta que va a utilizar para no cargarse los platos que yo sigo introduciendo mientras cotorreo y espero su respuesta aunque sinceramente se que no me va a contestar porque Manolito es mi lavavajillas.
¡Si lo se!, esto así en frío sin una buena exposición de los hechos aporta una puntuación muy elevada en la casilla de LOCURA y si la unimos a la votación del chucho inclinaría claramente la balanza, pero mi cerebro absurdo se niega a aceptar este resultado y de dispone raudo a presenta alegaciones al respecto.
La locura no es la que me motiva a bautizar los electrodoméstico, los coches..., bueno las cosas con las que convivo en general, podría decirse que lo hago porque soy tremendamente cariñosa y como mi dislexia a veces me juega malas pasadas es más fácil y afable convivir con Frígida (la Nevera), Milagrito (la Lavadora) o Crédula (la aspiradora); hay más pero no te voy a aburrir.
Tengo muy claro que son máquinas; te he dicho que no estoy loca; pero es este ínfimo detalle sin importancia el que ha desatado el debate, porque aunque creas que estoy algo perturbada, es su categoría de objetos la que me atribuiría un elevado nivel materialista y un gran apego hacia ellas. Analizo y decido descartar la primera, después de tantos años conviviendo conmigo misma me he demostrado que materialista no soy; pero con lo del apego, no se yo, no lo tengo nada claro así que como Manolito no se manifiesta busco ayuda de expertos en el tema.
El psicólogo Walter Riso en su libro “Desapegarse sin anestesia” dice sobre el apego que es una vinculación obsesiva sustentada en la creencia de que ese vinculo te hace feliz; conlleva la incapacidad de renunciar, genera dependencia, dándote la falsa sensación de seguridad total.Formula que es una vinculación afectiva la cual te roba la energía y te hace creer erróneamente, que le da sentido a tu vida.
Bueno vamos por partes que diría Jack:
Manolito sinceramente me hace feliz, lava los platos por mi y todo lo que sea trabajar poco a mi me pone muy contenta. En cuanto a la seguridad pues qué quieres que te diga también, limpieza y desinfección están garantizadas.
En tema renuncia y dependencia, es cierto llegó tarde a mi vida pero, ¡no pienso renunciar a el!...
...¡¡¡Uyuyuyyyy!!!, esto, esto me está empezando a asustar un poco.
¡Ah bueno no!, también dice que me roba energía y la verdad es que más bien me la, jeje punto a mi favor; y bueno sentido lo que se dice sentido no le da a mi vida, claramente no genera en mi una dependencia emocional.
¡Menos mal! pero...
...¡Jo! lo que si ha hecho es volverme a llevar al plano absurdo en el que tantas veces me muevo y ratifica, por un lado la opinión del Grumete y por otro, los estudios que afirman que invertimos el 80% de nuestro tiempo en cosas realmente inútiles lo que conlleva a un desperdicio total y absoluto de nuestras energías.
¡Mierda!, esto me da a mi que suma en la casilla de robo energético...
Eah! ser malos que es más divertido
yo lavavajillas no tengo... claro que vivo sola y en mi casa solo ceno... pero tengo un robot muy majo que me barre el suelo... yo también le he puesto nombre: lo llamo "esclavo"... y recuérdame que te cuente algún día lo que me pasó una vez hablando con una amiga de mi esclavo, cuando otra amiga creyó que hablaba de mi novio y me riñó y todo, hasta que le aclaramos que hablábamos de un robot muy majo, pero con el que solo mantengo una relación platónica...
ResponderEliminaren fin... que no estás loca, o si lo estás ya somos dos...
y que una alegría leerte!!!
besotes!!!
Jajajaja me parece a mi que tu quieres a tu esclavo como yo a Manolito y me consuela saber que nos soy la única loca
EliminarUn besote enorme
Yo, todo lo que me ahorre trabajo es mi archiamigo, camarada, socio... y puedo rozar el umbral de la locura si se me estropea y tengo que pasar sin él unos días.
ResponderEliminarBesazos.
Jajajaja pues entonces eres de las mías
EliminarBesote
Que buenas compañías.
ResponderEliminarLo único es que si hablan demasiado, su factura te puede recordar que hay amistades más baratas
No quiero mirar los gastos que acarrean mis relaciones porque entonces me daría algo
EliminarUn besote
yo creo más bien que la convivencia con estos objetos maravillosos y facilitadores de la vida nos hace tenerles un alto aprecio y de ahí ponerle nombres cariñosos.. nada de extrañar por otro lado,
ResponderEliminarhumanizamos a los objetos y cosificamos a los humanos..
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Si es curioso como los humanos somos capaces de hacer estas cosas tan raras que nos hacen empatizar con materialidad y no hacerlo con la espiritualidad
EliminarBesos
No creo que tenga que ver con la locura ni nada parecido ponerle nombres a las máquinas y sentir un cierto apego hacia ellas. Tenemos un coche de segunda mano que nos resuelve muchos problemas de desplazamiento, en casa lo llamamos "cochuco" en plan cariñoso, no creo que derive en locura ni dependencia, aunque quién sabe lo que pasará cuando le llegue su momento de jubilación.
ResponderEliminarUn abrazo.
Pues que lo jubilareis y contratareis los servicios de uno más joven y guapo como hacen las sociedades civilizadas ¿hombre faltaría más! jejeje
EliminarUN beso
Aquí entre nos, creo que la locura es algo genial que a nadie le debería faltar, al menos en dosis razonables, bien decía El sombrerero que las mejores personas están un tanto locas ;)
ResponderEliminarBesos.
Mira que bien yo pienso lo mismo cielo
EliminarUn beso muy muy grande
Yo ni siquiera le he puesto nombre a la cámara... debe ser porque soy huraña y asocial :D
ResponderEliminarEl lavaplatos lo uso una vez casi seis meses, más o menos, para que no se estropee... con la única que charlo a veces es con una escoba que baila el tango mucho mejor que yo. Mi santo a veces dice que alguna vez me marcharé volando en ella :D
Un beso, guapa
Jajajaja asocial no pero bruja parece que en proyecto
EliminarMuchos para ti cielo
El lavavajilla no sirve para mucho, al menos el que conozco es un harágán ya que primero debes lavarle la suciedad "más gorda" y recién allí los acepta. eso sí es un uen adorno para la cocina...jjeje!
ResponderEliminarBesos hoy desde
http://siempreseraprimavera.blogspot.com.ar/2014/10/una-sonrisa-antes-de-cocinar.html
Bueno mi Manolito es eficiente y muy limpio
EliminarUn saludo
pues yo no tengo lavavajillas ni falta que me importa, me frego los cacharritos a mano, lo mismo que hago con mis trapitos sucios, y luego toda mi preocupación desaparece como el jabón cuando me seco las manos, un abrazo de fairy.
ResponderEliminarBueno así estuve yo muchos años y no me hacía falta Manolito porque Fayry siempre me acompañaba pero no se un día surgió no se porque esta relación y parece que va a ser larga
EliminarBesos de pompas de jabón
Hola 40añera!
ResponderEliminarGracias por tu visita a mi blog, es un placer.
Interesante tus exposiciones. Te felicito por ello y por tu trabajo.
Un abrazo.
Ramón
De nada gracias a ti por pasarte
EliminarUn beso
Buenisimo !!!!!
ResponderEliminarNo quiero ni pensar lo que sucederia si hay apagon varios dias !!!!!!
Cariños mil!!!!!
Yo tampoco...
EliminarMuchas gracias ABU
Besotes
Ay preciosa, eres única e irrepetible y sabes? te contaré algo ahora aquí entre nos y que nadie nos ve... Yo le he puesto nombre a mi moto y a mi coche, ya que viajo en ellos al menos que los pueda llamar con propiedad o no??... Locas?.... Na... :)
ResponderEliminarMuchos besinos preciosa!!
Me encanta un día les tenemos que presentar a mi coche mi moto ahora tiene nuevo dueño y no se si habrá cambiado el nombre por despecho
EliminarBesotes mi niña linda
Yo estoy en guerra con el lavavajillas, el no me deja bien los platos y yo ni le uso, ni le nombro, le tengo abandonado, bueno el me abandono primero, en fin que es normal que le cojamos apego a lo que nos hace la vida más fácil.
ResponderEliminarUn besote.
Hey mi preciosa chiquilla me alegra mucho, mucho leerte.
EliminarDicho esto te dejo un abrazo enorme y unos pocos de besos
Yo me abrace varias veces con un mueble que me compre que hacia tiempo que queria comprar y a la semana un hermano me lo rompio por accidente. no se si sera bueno encariñarse con un electrodomestico pero espera a que todos tengamos robots humanoides y nos enamoremos de ellos. jejejeje
ResponderEliminarSe me pira la pinza un abrazo.
SI cuando llegue esto a mi por lo menos no me parecerá nada extraño jejeje
EliminarUn besote y mil gracias
Bueno, tú tranquila, conozco mucha gente, pero mucha, a la que cuando se le estropea Manolito, Frígida deja de congelar y Milagrito ya no piensa lavar nunca más, dicen con soltura que se han muerto. Yo jamás diría una cosa así de mi lavavajillas, nevera o lavadora. Por cierto he cambiado de teléfono, porque se me cayó al suelo, y el pobre... ; pero yo no lo maté, ¡eh!, que fue un accidente, que conste.
ResponderEliminarUn abrazo.
jajaja lo de tu teléfono fue un suicidio en toda regla eh!
EliminarOtro para ti más un beso
Yo tengo otro Manolito y estoy contento con su trabajo. Ingenioso relato, como siempre son los tuyos. Un abrazo
ResponderEliminarMil gracias caballero
EliminarBesos
Soy malo...pero me dicen que me paso..jejeje, un abarzo desde Murcia....
ResponderEliminarEn su justa medida siempre caballero...
EliminarOtro para ti desde Sevilla
Y normal que lo quieras tanto, ya me gustaría a mi tener uno!!! jajaja, me meo contigo!!!
ResponderEliminarjajaja si antes vivía perfectamente sin el pero en cuanto entró en mi vida no se vivir sin el
EliminarGracias cielo
Un besote
No he leído tu post ( me pasé de malo, jajaja)
ResponderEliminarpero si tengo una anécdota al ver la imagen
que has puesto.
La primera vez que se quedó a dormir
una mujer en mi casa, la sorprendí en mi cocina
y cerrando la puerta del lavavajillas
que haces le pregunté
nada, sólo he medito las cosas para que se laven.
gracias, le dije, no tenías que hacerlo.
Abrí la puerta para poner el detergente
y me lleve una sorpresa increíble
me enamoré de la forma en como había
colocado todo dentro del lavavajillas
fue algo que jamás se me había ocurrido
a mí que soy tan maniático
todo colocado de una forma exacta
un orden preciso y una certeza
que todo se lavaría mejor, incluso con mayor brillo.
desde ese día mi vida cambió
mi relación con un lavavajillas
pasó a un estado de pura complicidad.
ainss sorry no sigo más
no debería escribir en voz alta.
luego vuelvo a comentar el post
anterior, ese sí lo comento... jijiji
salgo corriendo
que hoy tengo tenis en la otra
punta de Madrid.
Besos!!!