Entradas

Mostrando entradas de febrero, 2011

Relevos Blogueros. 2

Imagen
Una compañera bloglera con la creatividad adherida hasta en su nombre,  CreatiBea , ha propuesto escribir una historia colectiva y ha comenzado en su blog Vinividivinvi . Se le ha ocurrido pasarme el testigo para continuar a mi.... ...¿tu te lo has pensado bien Bea?... Menos mal que también se lo ha dado a otro compañero y así la historia tomará dos caminos divergentes.  Bromas a parte, tengo que reconocer que me ha encantado la idea. El relato llega a esta casa y continuará por un sólo sendero. Las normas son sencillas: - Escribir un mínimo de 5 líneas y un máximo de 20, hecho esto pasar el testigo a  un compinche de nuestra elección quien  continuara un nuevo capitulo, (hay que numerarlo), luego lo pasará a otro y así hasta máximo 20 blogler. Al que le llegue el 20 será último. El se encargará de dar un desenlace final. Ah! se me olvidaba: es importante citar, enlazar y numerar las aportaciones para poder entender la historia, explicando clara y concisamente de que va esto,

La llave de Sarah

Imagen
Despertó sobresaltado, empapado en sudor y sin poder respirar.  Clavó sus ojos en el techo de la habitación intentando borrar las imágenes de su mente, las pesadillas habían vuelto y con ellas las noches de insomnio. Miro el reloj sobre la mesilla y comprobó que todavía faltaba mucho para que saliera el sol aunque sabía que su luz no lo ayudaría a difuminar los recuerdos, esos que lo llevaban una y otra vez hasta aquel verano del 42. Hacía ya muchos años que no podía contener sus sentimientos en aquella oscura habitación de su mente donde los había cerrado bajo llave. Retenidos tras la barricada del deber y el cumplimiento de las ordenes.  No sabía muy bien cual había sido el desencadenan. Qué llave abrió el cerrojo de esas estancias polvorientas de su memoria.  Al principio salió el olor, comenzó a percibir un ligero aroma a hacinamiento en sus ropas, las lavó pensando que se desvanecería pero no lo consiguió. El aroma lo impregnó de tal manera que se acostumbró a vivir co

Si, San Valentin lo sabía y no dijo nada.

Imagen
¡No lo aguanto más!, tanto corazoncito, infante alado con pañales disparando flechas, bombones y pétalos de flores decorando el ambiente están provocando en mi un impulso homicida por sobredosis de azúcar. Es que no se puede aguantar este ambiente almibarado que lo deja todo de un pringoso capaz de hacerte resbalar y contagiarte de tal forma que terminas recortando cartulinas de colores, dibujando con rotuladores fosforitos y purpurina un “de mi para ti con todo mi amor”. ¡¡Puafff!!.  Cuando la ciencia descubrió la importancia de las hormonas en las relaciones de pareja pensé que todo esto tenía los días contados, pero no, el estafador ese aún da sus últimos coletazos. No te escondas, si hablo de ti, músculo cónico, pretenciosos e impostor.  Se suponía que viéndote descubierto en tu vil engaño, ibas a desistir y dejar que Cerebro ocupara su lugar, ese del que lo has desterrado a lo largo de la historia.  Te has creído ilustre, insigne o superior por ser el motor de bombeo d

¿Seguimos?

Imagen
Hace un año llovía, no de esa forma mansa y tranquila que relaja el cuerpo y te invita a sentarte ante un gran ventanal a contemplar el discurrir de las gotas en los cristales al abrigo de un libro, una chimenea y un te caliente. ¡NO!, diluviaba con una alta dosis de mala leche. Caía tanta agua que los ríos, arroyos y torrentes del sur de España se declararon en huelga por exceso de trabajo.  El tejado de mi casa, con galones de veterano, abandonó a sus subordinadas las tejas moras, expertas en sofocar la canícula del estío sevillano, a su suerte que fue la mía, muy mala por cierto. De esta forma, llego un momento en el cual la lluvia conquisto gran parte, por no decir todo, el territorio interno de mi morada. No se podía hacer nada, la humedad se me coló en los huesos y en el alma y trajo con ella el desánimo. Este se alió con la tristeza, instalada en mi corazón desde que unos meses antes tuve que decir adiós a aquella peluda que durante 14 años fue para mi, compañera, hij